Eres mejor que si todos los dias de mi vida fueran mi cumpleaños y no envejeciera nunca. No lo sé, pero será tu olor, tu mirada, tu voz, tu cara, tu "yo" infantil que sale cuando te ve. Puede que sea esa forma de quererme que tienes y de hacerme sentir especial. Disfruto a tu lado, como una niña a la que le acaban de regalar su primer perrito. Tu sonrisa me mantiene viva y no dudaría ni un segundo al volver a pasar otra vida más a tu lado. Porque si tuviera que volver a nacer, volvería para conocerte. Ya que nadie me a echo sentirme tan fuerte como tú. Eres como mi canción favorita. De esas que piensas no cansarte nunca de escuchar. Eres como un beso de buenos días acompañado de miles de sonrisas y lleno de "te quiero" fáciles. O una ducha caliente en ese frío invierno. O esos abrazos que necesitas que te den siempre. También puedo decirte que lo eres todo. Pero no todo en el típico sentido de la palabra que utilizan siempre. Si no todo de verdad. Todo eso que una vez lo pierdes piensas que la vida no sirve más que para darte copias baratas y absurdas de esa canción que tanto te encanta y que es la mejor que has escuchado nunca.
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